Una bodega para hacer tu vino

Bruno Bresesti, cuarta generación de la familia, creó una plataforma con contenido propio, con clases virtuales, instancias presenciales y mentorías personalizadas

Bruno Bresesti, director de Bodega Bresesti, está convencido de que todos podemos hacer un vino fino de manera profesional. A fin de probar su teoría, ideó un método para que el sueño de elaborar la bebida de Baco pueda ser una realidad.

«Tenemos una plataforma con contenido propio, con clases virtuales, instancias presenciales y una mentoría personalizada», explica el bisnieto del fundador de la bodega que nació en 1937.

Tras recibirse como ingeniero agrónomo, Bresesti trabajó en viñedos de EE.UU. y, a su regreso, conquistó a su familia y la impulsó a hacer un vino de alta gama.

«Mis padres ya habían seleccionado las uvas para hacer algún vino, pero propuse trabajar el viñedo de otra manera. Hicimos 10 filas y de ahí nació un tannat premium que es nuestro tope de gama, lo presentamos en Francia y quedó entre los 1.000 mejores del mundo y eso fue un gran espaldarazo», comentó.

El premio apalancó el negocio familiar y la bodega se hizo conocida por ser meticulosa en la elaboración de vinos finos (hoy tiene más de 40 etiquetas).

Ahora Bresesti se propone compartir aprendizajes. «Este curso es para quienes quieren elaborar su propio vino, ya sea por hobby o porque alguien quiere reducir riesgos porque invertirá y está planificando un viñedo o un proyecto a largo plazo», detalló.

Cada alumno que siga el paso a paso, podrá elaborar vino de manera profesional. «El contenido explica el porqué de cada acción y complementa clases virtuales y presenciales», señaló Bresesti quien aseguró un mapa de ruta individual.

Además de videos específicos para cada tema -que van desde la plantación del viñedo y la elaboración a cuestiones legales o de marketing-, el curso incluye tres clases presenciales en Las Violetas, donde se verá el recorrido de la uva -desde la viña hasta que ingresa a la bodega- y tres instancias de mentorías personalizadas individuales.

No faltarán las degustaciones para que todos eduquen su paladar y puedan evaluar la evolución de su propio vino. Un imperdible.