El glamour dentro de una botella
Miraval Rosé 2019
Bodega: Jolie-Pitt & Perrin
Origen: Côtes de Provence
Precio: $ 1.390
Se dice que este vino es el rosado más vendido del sur de Francia. Y no sólo lo es por su categoría – que sin duda la tiene – también influye en este éxito que el Chateau Miraval donde se elabora, perteneció a Brad Pitt y Angelina Jolie. En 2008, la pareja de actores alquiló con opción a compra esta bodega de la Provenza francesa, cosa que después concretaron.
Se trata de una enorme edificación de 35 habitaciones, con viñedos, un lago, 20 fuentes, piscinas, gimnasio y además, de una pequeña capilla en la que los actores contrajeron matrimonio. Su glamour se acrecentó porque también tiene un estudio de grabación, usado por famosos de la música como Sting, Gipsy Kings y Pink Floyd.
Ubicado en el corazón de la Costa Azul, en el recoleto pueblito de Correns, uno que se enorgullece de haber sido en 1997, el primero en Francia en reconvertir y pasar a orgánica, toda su agricultura. En su comarca se incluyen unos 80 agricultores que cultivan todo tipo de frutales, viñedos, olivos, plantas aromáticas y las famosas lavandas.
El Chateau Miraval también cuenta en sus casi 500 hectáreas, con muchos de esos cultivos y hasta donde se sabe, fue un Pitt muy entusiasmado quien se propuso producir sus propios vinos. Para ello se asoció con Marc Perrin de Chateau Beaucastel, una empresa familiar del Valle del Ródano, que ya cuenta con 5 generaciones produciendo excelentes vinos.
Entre ambos decidieron continuar el manejo orgánico del viñedo y enfocarse en un rosado de gran calidad para hacerle honor, a la fama que tienen estos vinos de la Provence francesa. Elaborado a partir de las uvas tintas locales – Cinsault, Garnacha y Syrah – seduce por su perfil elegante, refinado y sutil. Ha pasado ya una década desde que las primeras 3 mil botellas del Miraval 2012 rosado se agotaron a las pocas horas de su lanzamiento y el éxito sigue.
A su delicado color no se le puede llamar rosado, por ser tan pálido y por su tinte grisáceo que más bien, se parece a la piel de la cebolla blanca. Su aroma oscila entre lo floral y lo frutado, es bien goloso en boca y eso lo destaca como su atributo principal.
Es ideal como copa de bienvenida o para armonizar con bocados refinados e incluso para servir con un gazpacho andaluz. Se vende directamente en La Vigne
EDUARDO LANZA
Ingeniero Químico y experto en vinos. Su pasión lo ha llevado a visitar terruños, descubrir cepas y probar las más variadas etiquetas. Comparte su saber y anécdotas de una forma atractiva desde hace más de 20 años. Escribe y enseña con el mismo placer que degusta un vino. Nos lo cuenta en un contexto histórico y cultural, y eso también lo hace diferente.